Quienes gusten de las series de animación japonesas y del manga quizá conozcan la franquicia Uma Musume. Algo hasta cierto punto lógico si tenemos en cuenta que hablamos de una franquicia bastante popular, especialmente en el país del Sol Naciente. En el resto del mundo tiene su aquel, aunque España no dice ser uno de sus territorios más fuertes. Sea como fuere, tiene sus fanes. Algo lógico si tenemos en cuenta que, desde su debut hace más de una década, ya que ha sido adaptada a muy diversos formatos. Hoy, en nuestro análisis de Umamusume: Pretty Derby – Party Dash, os quiero hablar —precisamente— de una de esas adaptaciones.
Eso sí, antes de comenzar quiero aclarar una cuestión: se nota que ha sido diseñado por y para los fans de la saga, puesto que de otra forma uno se pierde bastantes detalles contextuales. Personalmente, no la conocía, y es por eso que me ha costado bastante conectar con sus personajes y su escueto argumento. No obstante, a quienes sí la conocían les ha gustado, tal y como se puede comprobar en el 71% de críticas positivas que ostenta en Steam.
Ahora bien, ¿qué es Umamusume: Pretty Derby – Party Dash? A grandes rasgos, podemos hablar de una suerte de pequeño party-game que divide su acción en cuatro minijuegos: carreras de obstáculos, baloncesto, concursos de comida y balón prisionero. Especialmente diseñado para el modo competitivo, cuenta con un breve modo historia en el que podemos completar el circuito con hasta cuatro equipos diferentes. No obstante, este es muy breve, por lo que solo resulta ‘rentable’ si tenemos intención de jugarlo online.
Análisis de Umamusume: Pretty Derby – Party Dash
En caso contrario, lo cierto es que es bastante parco, pero se entiende si tenemos en cuenta que lo apuesta todo por el competitivo. Todo sea dicho, con esto sobre la mesa, y teniendo en cuenta que la variedad de minijuegos es bastante parca, creo que la relación calidad-precio no está demasiado bien ajustada. Esos casi 45 euros que cuesta me parecen un poco elevados, pero entiendo que los justifica por ser un juego que puede ofrecer contenido muy a largo plazo.
A fin de cuentas, desde una perspectiva más básica, la base es escueta. Por ejemplo, las carreras de obstáculos se dividen en sectores. Podemos obtener ‘x’ cantidad de puntos al quedar más adelante en cada uno, y se reinicia cuando los atravesemos para que siempre tengamos la posibilidad de remontar. En balón prisionero, hay varias rondas, y nos enfrentamos todos a la vez. En el concurso de comida tenemos que intentar hacernos con los mejores platos, y así una y otra vez.
Cada torneo se divide en lo que llaman Grand Prix, siendo un ciclo de competición en el que disputamos todas y cada una de estas pruebas. También se pueden realizar partidas individuales de nuestro minijuego preferido, pero la gracia es realizar torneos completos. El objetivo de todo esto es doble. Por un lado, escalar en el ranking del juego intentando ser el mejor. Por el otro, conseguir dinero para conseguir objetos con los cuales decorar nuestra propia sala.
Competición en estado puro
Si lo planteamos desde estos dos elementos, lo cierto es que la duración se extiende mucho, porque conseguirlo todo os requerirá muchas horas de esfuerzo. Si os gusta, es un buen motivo para engancharse durante más tiempo, justificando así mucho mejor su precio. Y lo cierto es que hay muchas opciones, por lo que podréis decorar vuestra sala de mil y un maneras diferentes. Todo ello bien acompañado un pixel-art bastante resultón y muy colorido.
Bien acompañado de una banda sonora bastante alegre, hablamos de un juego muy resultón a nivel audiovisual. Especialmente para, como ya he comentado, quienes gusten de la franquicia, siendo un deleite visual para los mismos. Al menos así lo han expresado muchos de los jugadores que sí han disfrutado del juego tanto por su premisa, como por su gameplay, como por su relación con la saga. Tiene su aquel, la verdad, y ha sido un detallazo que lo traduzcan al español.
Divertido a su manera, es uno de esos juegos que incentiva la competición al máximo nivel. La lucha por alcanzar los primeros puestos del ranking es verdaderamente encarnizada, y es que solo en un par de días ya hay una disputa bastante elevada. Si disfrutas de este tipo de situaciones, lo cierto es que Umamusume: Pretty Derby – Party Dash también suma bastantes puntos. Lo bueno es que el juego es bastante sincero con lo que ofrece. Es lo que ves, siendo esto algo que también se agradece.
- Si quieres todo, tiene mucho contenido.
- Audiovisualmente, es llamativo, especialmente si te gusta Uma Musume.
- Los minijuegos son divertidos.
- El factor competitivo puede ser un gran aliciente.
- No tiene mala player base pese a llevar tan poco tiempo y ser de ‘nicho’.
- Es caro para lo que ofrece si no eres muy fan de la saga.
- No hay mucha variedad de minijuegos.
- Puede ser repetitivo.