Es muy habitual que, a la hora de complementar nuestra setup, busquemos siempre productos originales fabricados, editados y publicados por la propia marca. Antaño, era el mejor sinónimo de calidad que podíamos encontrar en el mercado. Por suerte, las cosas han cambiado con el paso de los años, y ahora podemos encontrar productos igual de buenos —e incluso mejores— que los originales. Todo depende de lo que busquemos y/o necesitemos. Yo, por ejemplo, quería agregar un mando que pudiese funcionar tanto con como sin cable, con luces y algo más grande que los joycon originales. Fue ahí cuando aparecieron ante mí el Afterglow Wave para Nintendo Switch de Turtle Beach y PDP.
De buenas a primeras, lo que más me llamó la atención fue su diseño. Con hasta 9 metros de conexión inalámbrica y batería recargable, me dejé seducir por la idea de disponer de un mando con RGB personalizable. Por supuesto, esto era poco más que un capricho, ya que lo verdaderamente importante era lo bien que respondiese ante mis exigencias como jugador. ¿Satisfaría mis demandas y sacaría buena nota en aspectos tan importantes como el input lag o la robustez? Os lo cuento con pelos y señales.
Así es el Afterglow Wave para Nintendo Switch
De buenas a primeras, es importante diferenciar entre los dos modelos disponibles: con cable y sin cable. El primero tiene un precio de 34,99 euros (PVP) y solo puede funcionar cuando está enchufado a la consola. El segundo, el inalámbrico, tiene un PVP de 59,99 euros. A cambio incorpora una batería recargable y, tal y como ya he comentado, hasta 9 metros de conexión inalámbrica. Lo mejor de todo no es eso, sino que cuenta con licencia oficial de Nintendo, incorpora controles de movimiento, nos permite mapear los botones traseros para personalizar la experiencia y dispone de agarres antideslizantes.
Vaya, que no solo es un mando bastante bien preparado, sino que tiene en cuenta las condiciones de Nintendo Switch. O lo que es lo mismo, no perdemos la capacidad de jugar controlando el movimiento del mando, siendo esto algo que aprecio bastante. Sea como fuere, estas son ‘solo’ sus especificaciones técnicas y características. Lo verdaderamente importante es como se siente entre las manos… Y ahí la verdad es que cumple con muy buena nota. Lo primero que podría destacar es que es un mando muy ligero. En ese sentido, recuerda a los mandos inalámbricos propios de la propia Nintendo.
No sabría deciros cuál es su peso exacto, pero es muy reducido. Esto es algo que me gusta, la verdad. En lo que respecta al tacto, se siente bien entre las manos, y como es más grande, se adapta mejor a las manos de una persona adulta que los joycon originales. En mi caso, por ejemplo, siempre siento que necesito algo más de espacio. Con este mando no tengo ese problema, pues se ajusta bastante mejor a mí. Y aunque hablo desde la perspectiva de un adulto, entiendo que será parecido incluso en niños. El caso es que es una buena alternativa a los controladores tradicionales de la Switch.
Un mando con buen rendimiento
Lo he estado probando durante una semana y media, aproximadamente, y durante todo este tiempo me ha ofrecido muy buenos resultados. Para empezar, no he notado nada de input lag ni en modo inalámbrico ni con cable, por lo que la respuesta entre pulsación y acción en el juego es la misma que la de los mandos originales. La batería tiene una duración bastante elevada. No sabría deciros el tiempo exacto, pero han pasado más de 15 horas entre carga y carga con casi total seguridad. Si tuviese que tirar de estimaciones, diría que tiene para unas 20 por recarga, aproximadamente.
Los sensores de movimiento incorporados también responden con precisión, siendo este uno de sus agregados más importantes. En general, no he notado diferencia con los joycon originales en términos de precisión, por lo que los resultados son bastante parecidos. Por su parte, la iluminación RGB es bastante bonita, y tiene cuatro modos preestablecidos. Curiosamente, al final es a lo que menos atención le he prestado a la hora de determinar su calidad, pero es un agregado —cuando menos— muy interesante.
A modo de conclusión, el Afterglow Wave para Nintendo Switch me ha dejado con muy buenas sensaciones y ha sido una adición muy interesante para mi setup. Los resultados que me ha ofrecido son de alta calidad y, en general, es un mando que responde bastante bien ante casi cualquier exigencia dentro de las peculiaridades de la consola de la gran N. Vaya, que me ha dejado con buen sabor de boca. Si al igual que yo te gustan los mandos algo más tradicionales, te recomiendo que le eches un vistazo; puede que sea lo que estabas buscando.
