Lentamente, Dice Club fue dejando cada vez más espacio a las inquietudes de sus protagonistas, ya fuera en el plano profesional —su futuro—, familiar o incluso en el amoroso. Como slice of life, durante mucho tiempo centró todos sus esfuerzos en presentar toda clase de juegos de mesa mientras íbamos conociendo poco a poco a sus protagonistas.
Al principio era prácticamente todo y la mayoría de episodios se resumían en una o varias partidas a un mismo juego con ellas de fondo. Poco a poco el porcentaje se fue nivelando, ajustando cada vez más el contenido. Ahora, siete tomos después, los juegos de mesa siguen siendo muy importantes, pero han cedido parte de su protagonismo en favor de otras cuestiones.

Esto no quiere decir que Nakamichi-sensei los haya abandonado. De una manera u otra, siempre acaban disfrutando de una partida a un juego hasta la fecha inédito en el manga. Continúa parte de su núcleo narrativo, pero ya no es siempre el eje. Ahora aspectos tan rutinarios como una confesión han ganado puntos.
No diré quién, pero una de nuestras protagonistas se enfrenta a su primera confesión… y no sabe qué responder. Nunca ha estado enamorada, por la que la evolución de los acontecimientos la pilla completamente por sorpresa. Es una de las gracias del manga: estamos viendo como crecen en varios sentidos.
Reseña de After School Dice Club n.º 7 | Portada, sinopsis y edición

Un día llega una carta para Hana, la hermana mayor de Aya. Sin embargo, la pobre Hana se siente feliz y angustiada al mismo tiempo. Empieza la conmovedora historia de los lazos entre hermanas, con episodios que incluyen un legendario juego tradicional y otro tan terrorífico ¡que te dejará temblando!
| Colección | After School Dice Club vol. 7 de 10 |
| Autoría | Hirô Nakamichi |
| Género | Comedia, slice of life, vida escolar |
| Formato | Tapa blanca con sobrecubierta |
| Tamaño y páginas | 13,1 cm x 18,1 con 376 páginas en b/n |
| Precio | 15,95 € |
| Traducción | Luis Alis y María Hernandis (Nagareboshi) |
| Fecha de lanzamiento | 9 de octubre del 25 |
| Reseñas | Volúmenes anteriores |
Todo sea dicho, debo confesar que el autor sigue integrando algunas escenas en donde hay algo de fanservice sin demasiado sentido, agregando secuencias que —en realidad— no aportan nada. Hacer un comentario sobre el tamaño de los pechos de una de sus amigas es algo que, a título personal, no dice nada en realidad.
Por suerte, este tipo de secuencias se cuentan con los dedos de una mano y son realmente poco habituales. No enturbian el valor final de la lectura, pero cuando aparecen, molestan un poco. En cualquier caso, y volviendo a lo que realmente nos interesa, Dice Club sigue siendo una lectura interesante.
Aunque este detalle no pasa desapercibido, el manga sigue manteniendo el nivel que hemos estado viendo hasta la fecha. De hecho, se nota que se está acercando al final y en cierto modo se agradece, pues ya se han gastado casi todos los cartuchos. La mayoría de sus historias están bastante avanzadas.
Una historia que sabe medir sus propios tiempos

Si bien es cierto que estoy disfrutando del viaje y que mis sensaciones con Dice Club son buenas, también entiendo que cerrar la serie con 10 kazenban era lo adecuado. Alargarla más no le habría sentado bien, así que de momento me marcho (de este todo) con la sensación de que su extensión final es adecuada.
Teniendo en cuenta que After School Dice Club también ha medido bien el ritmo narrativo, podríamos decir que es un manga que sabe medir con acierto sus propios tiempos. Tened en cuenta, eso sí, que lleva a rajatabla lo de ser un slice of life, ya que no hay grandes giros de guion ni contratiempos en casi ningún momento.
Más allá de pequeñas disrupciones narrativas propias del día a día y la rutina de casi cualquier persona adolescente o joven adulto, el trabajo de Nakamichi-sensei no destaca por ofrecer grandes sobresaltos. Es una historia bastante tranquilita de principio a fin… al menos de momento.

No tiene pinta de que esto vaya a cambiar, por lo que te recomendaría que lo tengas en cuenta antes de plantearte su lectura. Si no estás seguro de si dar el paso o no, tal vez te venga bien saber que tiene su propio anime y que más allá de las diferencias propias del formato, se parecen bastante. Es una adaptación relativamente fiel en la mayoría de aspectos.
El manga, por supuesto, llega más lejos, y es que la historia va a terminar con prácticamente la graduación de nuestras protagonistas originales. El tiempo ha pasado, pues dista mucho de esos tebeos que deciden que el tiempo sea un ente inamovible.
Sin grandes sobresaltos, nos acercamos al final
Esto no ocurre aquí, por lo que la progresión y evolución de los personajes se siente más coherente. Es algo que siendo sincero, considero que le sienta bastante bien. De otra manera es muy probable que el manga hubiese perdido parte de fuerza, ya que se habría sentido demasiado paroxista.

Si a veces ya se siente lento según qué condiciones y te puedes marchar con la sensación de que no ha ocurrido demasiado, sin el paso del tiempo se habría recrudecido tal sensación. Por suerte, aquí solo estoy teorizando, ya que no ha ocurrido de esta manera.
Eso no quita lo que ya he comentado: a veces sí es un poco lento, pues siguen habiendo capítulos que se centran demasiado en los juegos de mesa y en los que sientes que no hay mucho donde rascar. En cierto modo, es tanto una virtud como un defecto, pues es lo que lo define.
A modo de conclusión, os diré que si habéis llegado hasta aquí, pero aún no tenéis el séptimo volumen, el manga se mantiene al mismo nivel, y que si no conocéis la serie, solo por lo diferente que es su premisa original estaría bien que por lo menos le echaseis un vistazo a ver si os gusta. Es una lectura entretenida dentro de lo que propone.


- La premisa es bastante original. No hay muchos mangas que hablen sobre juegos de mesa.
- Las tres protagonistas tienen una construcción más interesante de la que parece de buenas a primeras.
- El arte es muy bonito. Es agradable a la vista.
- La lectura es dinámica y sencilla. Es fácil seguirle el ritmo.
- La narrativa funciona bien.

- Al centrarse tanto en los juegos de mesa, si no te llaman la atención, no tiene tanto gancho.
- El dibujo es bastante simple.