Hoy os traemos el análisis de Terra Nil. El nuevo videojuego editado por Devolver Digital que nos invita a reflexionar sobre el ecologismo.
A finales de marzo de 2023, Free Lives y Clockwork Acorn nos sorprendieron con uno de los cozy games más simpáticos, curiosos y entretenidos del momento. Con motivo de su lanzamiento, os hablamos de él en nuestro primer análisis de Terra Nil.
Ahora, dos años y medio después, hemos decidido actualizar aquel tema para contaros cuáles son nuestras sensaciones aprovechando el lanzamiento de su actualización gratuita Heatwave en PC, Switch y móviles. No obstante, como sabemos que muchos de vosotros tal vez no lo conozcáis, dividiremos este artículo en dos partes.
En primer lugar, os mostraremos el análisis original de este tranquilo y sencillo juego. Acompañado de un mensaje tremendamente potente que invita a la reflexión medioambiental, es perfecto para los que busquen desconectar un ratito. Y mejor ahora que nunca.
Habitualmente, podéis haceros con él en Steam a un precio total de 24,99 €, pero en estos momentos está de oferta (y hasta el 14 de agosto) por 9,99 euros. Dicho esto, y antes de empezar, os ofrecemos un pequeño adelante de lo que os podéis esperar: una apuesta divertida que da un cambio de aires a los tradicionales juegos de construcción, precisamente, fomentando lo contrario.
Si normalmente se destruye el entorno en pro del progreso de la ciudad, ahora toca recuperarlo como consecuencia. ¿Cómo sería un juego de construcción a la inversa? Eso es lo que nos propone el equipo de desarrollo Free Lives con su genial Terra Nil. Os lo contamos.
Análisis de Terra Nil | La premisa es perfecta
Como comentaba anteriormente, es un juego cuya premisa es sumamente interesante. Tradicionalmente, los videojuegos de construcción han seguido una lógica capitalista en sus programas de jugabilidad. Esto es, para progresar y ganar más dinero, la ciudad debe crecer sin límites y a costa del medio natural donde se ubica y explotando sus recursos. Básicamente como se hace en la realidad.
No obstante, Terra Nil nos propone justo lo contrario. Un planeta destruido por ese tipo de construcción sin parangón ha ocasionado la catástrofe medioambiental. Nuestro objetivo es recuperar los páramos naturales y reinsertar a las especies animales en sus hábitats correctos. Para ello usaremos edificios reciclables y elementos no contaminantes para que, una vez recuperemos el páramo natural, no dejar nada contaminante.
Un juego supersencillo en jugabilidad y que, al mismo tiempo, invita a una reflexión tan grande y necesaria. Ya no solo del modelo productivo, también de cómo concebimos los propios videojuegos del género de construcción.
Una jugabilidad perfecta


Siguiendo con la «contra propuesta» que nos ofrece Terra Nil, a diferencia de los otros juegos de construcción, la jugabilidad es sencilla y el gameplay busca ser lo más tranquilo posible. Normalmente, este género nos lleva al agobio más extremo cuando las cadenas de producción y gestión son muy grandes y avanzadas. Aquí no. Sigue los pasos y completa las 3 fases de desarrollo para recuperar el páramo en el tiempo que necesites.
A través de un manual que hace de códice, podremos ver los objetivos, fauna, tipología de edificios y característica de todo para estar informados. Más allá de eso, todos los mapas son generados por la programación procedimental, así que no habrá dos iguales nunca. De esta manera, siempre habrá un componente innovador a la hora de formar las tres fases:
- Fase 1: recuperación de biomas naturales pertenecientes al área climática. Hay cuatro zonas de intervención: área tropical, continental, polar e isleña.
- Fase 2: recuperación de los paisajes típicos de cada zona. Además, para conseguirlo habrá que manipular el clima hasta conseguir el equilibrio perfecto que permita crecer la naturaleza propia del lugar.
- Fase 3: reciclaje e incorporación de la fauna local. Para ello habrá que atender a las características de cada animal y ubicarles en su zona correspondiente. Tras ello, usando a nuestro dron, recuperar las estructuras empleadas y dejar todo reciclado.
A medida que vayamos avanzando, desbloqueamos diferentes regiones del planeta para recuperar. Cada una con sus particularidades y sin haber ningún mapa igual. Asegurando las horas de juego y la innovación estratégica. Ah, y ojo con despilfarrar. No hay dinero, son hojas verdes, para ganarlas tendremos que asegurarnos de conseguir el mayor beneficio ecológico con la menor cantidad de edificios. La clave: ser eficientes, producir lo justo y reciclar.
Análisis de Terra Nil: conclusiones del juego base

Terra Nil nos ofrece un refugio donde poder disfrutar y apreciar un paisaje natural recuperado por nosotros mismos. Los entornos pintados a mano, la música relajante y los ambientes sonoros evocadores convierten Terra Nil en una experiencia apacible y relajante. De hecho, el apartado gráfico es una delicia y es hipnótico el ver a los animales vivir en el hábitat.
Es novedoso por el planteamiento, es innovador por su puesta en escena y es divertido. Todo el mundo que le apetezca introducirse en el género o de disfrutar un indie casual, debería tenerlo en cuenta. De ahí que mi nota global sea…
Una actualización gratis que hace que el juego sea incluso mejor: Heatwave
Si Terra Nil ya nos pareció muy bueno allá en su momento, ahora lo es incluso mejor. Para empezar, ha potenciado su variedad animal agregando 13 nuevas especies. Entre ellas podemos encontrar cocodrilos, hienas, buitres o elegantes. Su presencia le da incluso más profundidad al juego, haciendo que la gestión de biomas sea más ‘desafiante’.
Como es lógico, estos 13 animales inéditos están muy ligados a los tres nuevos mapas que podemos completar: Parched Dunes, Canyon Peaks y Fracked Floodplain. Son de los más complicados tiene el juego, por lo que son perfectos para sumar varias horas de juego sin coste adicional.
Y eso es lo que más me gusta: que no tenemos que pagar. Siendo sincero, creo que es un detallazo por parte de la desarrolladora. Engrandece más su juego, y como no cuesta nada, hace que sea mejor sin tener que realizar ningún tipo de inversión. En este caso, los nuevos biomas le dan un nuevo aire a Terra Nil y le dan un soplo de aire fresco.
Además, el nuevo robot de reciclaje terrestre nos da muchas opciones, pues ahora podemos reciclar a distancia en los biomas de cactus. Aporta mucho, le da una pequeña vuelta de tuerca a la reforestación y tiene mucho sentido. Ahora bien, tened en cuenta que 3 biomas dan para lo que dan.




No extiende demasiado la experiencia original, pero siendo gratis, no podemos pedirle peras al olmo. Es más, mi opinión es que nos da justo lo que necesitábamos y suma mucho. En resumen, si Terra Nil ya nos parecía bueno, ahora pensamos que es incluso mejor.


- La jugabilidad y planteamiento que ofrece.
- La generación por procedimientos de los mapas.
- El apartado gráfic es muy atractivo. Es un juego realmente bonito.
- Su propuesta es algo completamente diferente a lo habitual.
- La curva de aprendizaje es muy amable.

- Aunque aprender es fácil, lograr todos los objetivos se atasca demasiado en determinados niveles.
- La música es muy relajante, pero en ocasiones se confunde con el sonido ambiental.