¿El Big Three de primavera?
Tras el chasco de Clockwork Planet, mis impresiones sobre la temporada de primavera volvieron a decaer. Recientemente, inclusive, actualicé algunas de esas impresiones para ratificar mis opiniones. Re:Creators logró mantenerse en una buena posición, mas Clockwork Planet cayó en picado. Renai Boukun, igualmente, nunca fue un verdadero candidato a reinar; el anime basado en la Kiss Note, en realidad, solo era una serie de relleno. Finalmente, comencé a investigar sobre algunos de los estrenos de esta temporada. Con el paso de los días, por suerte, logré encontrar dos series que captaron mi atención. La primera de ellas fue Shūmatsu Nani Shitemasu ka? Isogashii Desu ka? Sukutte Moratte Ii Desu ka?, pero de esta os hablaré más tarde. Mi otro encuentro fue con Roku de Nashi Majutsu Kōshi to Akashic Records.
Estas dos últimas, junto a Re:Creators han sido, en mi opinión, las vencedoras de la presente temporada —ignorando secuelas—. Ciertamente, hoy debo retractarme de mis palabras. En un comienzo, pensé que esta temporada iba a ser bastante mala. Sigo pensando, pese a todo, que flojea ligeramente, pero no tanto. La secuela de Boku no Hero, en conjunto a estas tres series que acabo de destacar, hacen de primavera una temporada más que pasable. Inclusive, series tales como la secuela de Shingeki no Bahamut —soy muy contrario a Shingeki no Kyojin, pues no me gusta demasiado el anime— han logrado elevar el nivel todavía más. Primavera 2017, finalmente, no ha sido un descalabro. Hoy pido perdón, pues terminé por prejuzgarla demasiado pronto.
Roku de Nashi Majutsu Kōshi to Akashic Records
Roku de Nashi Majutsu Kōshi to Akashic Records es una serie de novelas ligeras escritas por escritas por Tarō Hitsuji e ilustradas por Kurone Mishima. Fujimi Shobō, vieja conocida en la industria de las novelas ligeras, es la editorial encargada de su publicación. Actualmente, las novelas siguen en activo, y desde 2014. Asimismo, cuenta con una adaptación manga escrita por Hitsuji, pero ilustrada por Aosa Tsunemi. En su caso, empero, se publica en Shōnen Ace de Kadokawa Shōten. El anime, finalmente, ha sido estrenado en 2017; Liden Films es el estudio responsable de su producción. Un dato que tener en cuenta, por desgracia, es que la serie solo tendrá 12 capítulos. Viendo el argumento, es plausible, mas considero que la historia puede dar mucho más de sí.
Diseño y animación
Quiero empezar hablando de este apartado, pues lo considero especialmente controvertido. Roku de Nashi Majutsu Kōshi to Akashic Records es un shōnen con tintes adultos y buen diseño. Atendiendo al simple arte, hay dos aspectos muy importantes: la estética no es especialmente original y los atuendos… Sinceramente, no comprendo qué necesidad hay de diseñar un uniforme tal que así:
No puedo evitar sentirme ciertamente molesto ante tal diseño de vestimenta. Creo firmemente, y ojala me equivocase, que responde a un simple y llano razonamiento: fanservice puro y duro. De hecho, no sé de qué me sorprendo. El anime y el manga japones, una de mis mayores aficiones en este mundo, está carcomido por el ecchi y la sexualización. No me creo, la verdad, que este uniforme responda a una verdadera necesidad argumental… Lo siento, pero me ha chocado mucho el diseño; tenía que decirlo. En otro orden de cosas, la animación es realmente buena. Los personajes, aunque estereotipados, tienen ciertos rasgos que destacan enormemente sus personalidades. El uso del «humor de caras» le da un punto. La animación, por su parte, está bastante bien.
Argumento
¡Esto sí que sí! Aunque de buenas a primeras parece la típica comedia romántica inspirada en un colegio repleto de magia y fantasía, no es así. El espectáculo visual de Roku de Nashi Majutsu Kōshi to Akashic Records es una máscara tras la que se oculta una historia con una profundidad, madurez y rabia más intensa de lo que quiere demostrar. Glenn Radas y Rumia Tingel, personajes de los que os hablaré más adelante, son el paradigma de la tragedia y la alegría. Su presencia enaltece un argumento bien trazado y con algo más. No estamos, precisamente, ante una obra maestra, pero sí ante un anime de muy buen ver.
El guion no es nada del otro mundo, lo confieso, pero tiene algo que logra enganchar al espectador. Su humor desenfadado entra en contraste con las argucias de sus personajes. Quiero pensar que la historia, en ese punto de sangre y tragedia que tiene, va a evolucionar de forma muy correcta. Cierto es, empero, que no se sabe demasiado sobre la facción «enemiga», y que su concepto inicial parece algo forzado, pero… No sé, creo que pueden dar mucho juego. Estas presuposiciones están basadas tanto, hasta cierto punto, en la esperanza de tener algo que elogiar esta temporada. Un factor que juega en su contra, por desgracia, es la duración: creo que doce capítulos no dan para mucho, y creo que acabará mal.
Resumiendo el argumento
A veces sé que puedo ser algo confuso, así que voy a resumir mis impresiones en las siguientes líneas: es un anime con ciertos clichés cuya historia, simple en su superficie, denota una profundidad envolvente. El argumento tiene gancho, y presenta cierta madurez muy atípica en este tipo de historias. La presencia de un colegio de magia hace pensar en una comedia romántica de grandes poderes, mas no es así.
Las limitaciones de los personajes son reales, y los diálogos son sólidos. Es una serie, empero, que requiere ser vista de principio a fin para poder ser valorada de forma más apropiada. Espero mucho de ella, pero aún no sé qué es lo que va a pasar. Puede ser un fiasco, mas espero lo contrario con los capítulos actualmente emitidos. Asimismo, espero una segunda temporada pronto, pues considero de vital importancia un mayor metraje para desarrollar todo su potencial.
Personajes
Volviendo a lo dicho anteriormente, quiero destacar a Glenn Radars y Rumia Tingel. El tercer personaje en discordia, Sistine Fibel, podría ser considerada como la protagonista femenina, mas la realidad no es esa. Rumia, quien muestra el espectro de un coprotagonista, es la verdadera dueña de la escena. Glenn, por su lado, acapara muchos minutos en pantalla, pero su aportación está muy ligada a la de sus alumnos. Ahora bien, Radars es un personaje que ha logrado captar poderosamente mi atención. Inicialmente, parece un simple joven de actitud pasota e intrascendente. Pronto, sin embargo, revela ciertos detalles de su pasado que lo hacen destacar. No diré mucho más, pero considero que es un personaje con una línea de personalidad muy bien trazada y un trasfondo especialmente adecuado. El chico, en ese sentido, cumple de sobra.
Rumia, por su parte, es el eje central de la historia aunque no lo parezca. Su relevancia en la historia es capital; el apartado psicológico puede dar más de sí en ella, pero considero que ha sido concebido como un personaje de cara al futuro. Las implicaciones emocionales de su pasado, sus rasgos característicos, etc. hacen de ella lo que es en realidad: una adolescente. Es una joven que necesita crecer, como debe ser. Sistinae, por su parte, responde algo más a las necesidades comerciales. Es una dere de cajón, y su personalidad es la que responde a los cánones japoneses con mayor profundidad. Pese a todo, también creo que puede convertirse en un personaje de gran calado y profundidad.
Por tanto, y resumiendo lo dicho anteriormente, son personajes que no están concebidos en su totalidad. Esto, ciertamente, es algo que considero necesario; un personaje con capacidad de crecer, evolucionar y mejorar, pero bien planteado, es muy notable. Sistina, a mi juicio, es quien peca de menor profundidad y mayor trascendencia comercial.
Mis primeras impresiones
Hoy, aunque parezca extraño, no voy a resumir mis primeras impresiones en un apartado mas, ¿por qué? Creo que, en ese sentido, hoy estaría siendo especialmente redundante. Creo que los apartados recogen bastante bien las que han sido mis consideraciones. Diré, simplemente, que os la recomiendo. Roku de Nashi Majutsu Kōshi to Akashic Records es un anime que se merece una oportunidad y que, en caso de hacer bien las cosas, puede llegar a ser una serie realmente notable.
