Primeras impresiones: Fire Emblem Echoes Shadows of Valentia para 3DS

Es el segundo remake de la saga, esta vez del título de 1992 Fire Emblem: Gaidon que nunca salió a la venta fuera de las fronteras niponas

0

De Fire Emblem Gaidon a Fire Emblem Echoes

Lo nuevo de la conocida saga Fire Emblem llega con Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia, una entrega que se lanza en Nintendo 3DS y que ofrece nuevas mecánicas y gráficos renovados.

Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia es un nuevo juego de la conocida saga de Nintendo que supone el segundo remake de la franquicia, esta vez de uno de sus títulos que jamás traspasaron las fronteras niponas: Fire Emblem Gaidon, un título que se lanzó para la Famicom originalmente en 1992 y que nunca llegó a tierras europeas ni americanas. 

A pesar de ser un remake, no deja de tener identidad propia, ya sea por sus nuevas mecánicas (tanto novedosas como recogidas de otras entregas) como por esos nuevos gráficos que llevan a Nintendo 3DS al límite de sus capacidades.

Shadows of Valentia: pugna de Dioses

La historia comienza con una cutscene donde vemos dos amigos, los protagonistas de la historia, el joven Alm y la joven Celica, que prometen no enfadarse nunca como los dioses del libro que Alm está leyendo sobre la historia de Valentia.

Alm y Celica, los protagonistas de la historia y que determinarán el futuro de Valentia y de ambos reinos, Zofia y Rigel.

Los dioses Mila y Duma estuvieron en pugna por crear una forma de vida distinta en Valentia hasta que acordaron dividir el reino en dos. Mila se quedaría con el sur, siendo éste un lugar de ocio y confort donde la gente pudiera vivir feliz y Duma el norte, con un imperio férreo donde la humanidad estuviera regida por normas estrictas para convertir a los humanos en seres más fuertes.

La realidad es que ninguna de las dos formas son las más adecuadas y, precisamente por ser tan dispares, los lugartenientes de ambas partes convivieron en armonía un tiempo, hasta que se corrompieron.

Y en este clima entran Alm y Celica, que deben restablecer la paz que se ha perdido. Los protagonistas viven ya en caminos separados pero sus ejércitos deberán trabajar en paralelo para devolver la armonía a los reinos de Zofia y Rigel, una tarea que no será nada fácil y que los reunirá de nuevo.

Estilo táctico: un pasito atrás y otro adelante

Fire Emblem Echoes tiene ese estilo táctico que caracteriza a la saga pero, debido a que quiere ser fiel a la pieza original de la que se inspira, ha eliminado algunas mecánicas de los últimos trabajos para introducir otras que nos recuerdan mucho a los RPG’s más clásicos en un afán por tratar de ser fiel al título original.

Este es el caso de la desaparición del triángulo de armas que se ha visto sustituido por un único compartimento donde podemos colocar un objeto de curación individual, curación grupal o algún ítem que puede ser utilizado para mejorar ciertas habilidades.

El tablero nos permite poder ver el área «dominada» por los enemigos y los movimientos que tanto ellos como nosotros podemos realizar. La estrategia es muy importante.

El combate es, como siempre, táctico. Conforme nos acercamos a los enemigos, automáticamente nos muestran el tablero para ir luchando contra los enemigos que aparecen junto a nuestro equipo, en esta entrega formado por varios compañeros que no pueden elegirse, sino que ya vienen «de serie» por así decirlo. El combate funciona mediante turnos, como suele ser en este tipo de juegos tácticos y tal cual nos acercamos al enemigo a combatir, pasamos del tablero a un entorno 3D donde vencerlo.

Otra de las particularidades del juego es el sistema de progresión, que es muy flexible y nos permite personalizar a los personajes como mejor lo veamos. A pesar de ello, bien es cierto que se han reducido las posibilidades respecto al sistema de clases. Y eso es algo que da la sensación de dar un paso atrás en la saga.

Además, las armas vienen ya predeterminadas puesto que no existe el compartimento específico y funciona de modo automático, aunque puedes cambiarla a través del menú de personalización.

Las luchas contra los enemigos suceden en 3D conforme estamos en la casilla contigua.

Los magos pierden vida por cada magia utilizada, por poner un ejemplo, por lo que no usan armas. Y los arqueros, que también han cambiado, esta vez ha sido a mejor porque pueden atacar a las casillas colindantes, algo que no se podía en el título original.

Eso sí, hay un elemento añadido que estará habilitado incluso en el modo difícil (existen, en Europa, dos dificultades) y es el de la rueda de Mila. Es un artefacto que manipula el tiempo y con el que podremos retroceder en los movimientos por si nos mataron alguna unidad o falló nuestro ataque. Lo único malo, que tiene límite de uso por combate.

Mazmorras en 3D

Una de las particularidades del título y que es algo muy interesante son las mazmorras que veremos a lo largo del título y que nos han parecido un añadido muy interesante. Dentro de estas mazmorras, los entornos están recreados en 3D y encontraremos enemigos, objetos especiales y tesoros.

Algo que es también destacable es la forma en cómo los personajes pueden cambiar de clase: siempre que estemos frente a una Estatua de la diosa Mila, que solo se encuentran en estas mazmorras. Podremos aumentar de clase al siguiente nivel pero, cada vez que lo hagamos, mejoraremos en estadísticas al personaje en cuestión.

Aquí podemos ver un ejemplo de las mazmorras que encontraremos durante todo el juego y que son jugables en tercera persona y en entornos 3D por primera vez en la saga.

Aún así, hay que tener especial cuidado con la fatiga. Lo notamos mucho una vez estás dentro de las mazmorras y precisamente para recuperar el aliento de nuestro equipo será indispensable contar con alimentos y realizando ofrendas a las Estatuas de Mila. Hay que recordar que si tenemos el equipo fatigado puedes acabar en un combate muy mal parado porque las estadísticas de los personajes se ven mermadas e incluso la propia salud.

No obstante, el problema que hemos visto en estas mazmorras es que son lugares un poco «vacíos». Por lo que a veces pueden llegar a aburrir un poco, aunque es de agradecer que en la saga hayan dado un paso más allá y las mazmorras sean por primera vez entornos en tres dimensiones. 

Aspecto visual

Nuestro veredicto respecto a este apartado es muy positivo. Los entornos están muy bien resueltos, los personajes tienen muchos detalles en su diseño, las mazmorras en 3D son todo un regalo y, en general, parece que el título fluye bien en la Nintendo 3DS.

La exploración es en 1ª persona en las ciudades y pueblos que visitamos y se aprecian unos buenos gráficos teniendo en cuenta el soporte al que va dirigido.

Sin duda estamos ante un buen juego que promete muchas horas de entretenimiento y es de agradecer que dentro de esta saga se haya realizado este remake para que todos los fans puedan disfrutar de este título que nunca vio la luz en nuestras tierras.

A pesar de nuestra valoración, nos gustaría que aquellos que ya estáis jugando a Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia nos dierais vuestra propia opinión personal que, como siempre, podéis realizarla en los comentarios o a través de nuestras redes sociales.

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here